7 beneficios del calostro
Autora: Cecilia Valdez
El calostro es la primera leche producida por la mamá desde la semana 12 del embarazo, sin embargo, estará disponible los primeros días después del parto, con la finalidad de ofrecer al bebé. Es un líquido espeso y amarillento que está repleto de nutrientes esenciales, como grasas y proteínas, además de compuestos bioactivos, de acuerdo con La Leche League International.
Juega un papel crucial en las primeras etapas de la vida de un bebé y ofrece numerosos beneficios. Estos son algunos para los recién nacidos:
- Apoyo Nutricional: es rico en proteínas, carbohidratos y grasas, proporcionando al recién nacido los nutrientes esenciales necesarios para el crecimiento y desarrollo. También contiene altos niveles de vitaminas y minerales, incluyendo vitamina A, vitamina E y zinc.
- Anticuerpos e inmunidad: posee una alta concentración de anticuerpos, como la inmunoglobulina A (IgA), que ayudan a proteger al bebé de diversas infecciones. Estos anticuerpos respaldan el desarrollo del sistema inmunitario del recién nacido y brindan inmunidad pasiva contra enfermedades comunes.
- Salud digestiva: actúa como un laxante natural, ayudando al bebé a expulsar el meconio (la primera deposición). Contiene sustancias esenciales para el desarrollo del sistema digestivo del bebé, promoviendo el crecimiento de bacterias intestinales benéficas y protegiendo contra patógenos dañinos.
- Respalda el crecimiento: gracias a que contiene factores de crecimiento, como el factor de crecimiento similar a la insulina 1 (IGF-1), que incluso respaldan el desarrollo de los tejidos. Estos factores de crecimiento contribuyen a la maduración de varios órganos y sistemas en el cuerpo del bebé.
- Protección de la piel: tiene propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias que logran proteger la delicada piel del bebé. Incluso es eficiente en la curación de irritaciones menores de la piel, prevención de infecciones.
- Desarrollo cerebral: contiene ácidos grasos esenciales, incluido el ácido docosahexaenoico (DHA), que es crucial para el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso del bebé.
- Vínculo emocional: la lactancia materna y el acto de recibir el calostro permiten un contacto esencial de piel con piel entre la madre y el recién nacido. Este contacto promueve el vínculo emocional y una sensación de seguridad para el bebé.